 
        Foto: Alejandro Sancho
El Atlético de Madrid se juega la Liga en Valladolid y la afición lo sabe. Por ello, la afición ha respondido a la convocatoria Invasión Rojiblanca, en la que se instaba a los aficionados a desplazarse a Valladolid. Ante la repercusión, la subdelegación del Gobierno en Valladolid, junto al equipo vallisoletano y el Atleti, se han reunido para determinar el operativo policial que se llevará a cabo este sábado. Con el objetivo de evitar incidentes, el partido ha quedado declarado de alto riesgo. Un dispositivo de Seguridad en Valladolid que contará con, al menos, dos grupos de la Unidad de Intervención Policial y seis de la Unidad de Prevención Reacción.
El subdelegado del Gobierno, Emilio Álvarez, ha asegurado que esperan alrededor de 3.000 aficionados colchoneros en Valladolid. Unos datos que podrían variar, ya que tienen constancia de los aficionados que llegarán en AVE y autobuses, pero desconocen la cantidad de personas que podrían llegar en vehículos particulares hasta la localidad castellanoleonesa. En el partido, declarado de alto riesgo, se ha estipulado un dispositivo, que podrán sumar nuevas unidades de intervención, siempre y cuando fueran necesarias y según sea la situación.
El dispositivo de seguridad previsto para el sábado en Valladolid comenzará con la recepción de aficionados que lleguen en tren. La Policía les acompañará a los colchoneros hasta la Plaza Mayor, para después guiarlos a las inmediaciones del estadio. Además, allí en el estadio, y con el fin de que no haya enfrentamientos entre las dos aficiones, el Cuerpo Nacional de Policía contará con una serie de vallas, para poder separar a los aficionados. Todo ello en un día que, de ser festivo para el Atleti, lo más probable es que sea un día negro para los aficionados del cuadro blanquivioleta, que es están jugando no descender a la Segunda División del fútbol español.

 
         
        