CRÓNICA. Barrios comanda un Atleti mejorado y en Champions

El Atlético de Madrid despide el 2022 ganando al Elche CF, en un partido espeso, comandado por Pablo Barrios en su debut en el Estadio Metropolitano y dejando al equipo entre los cuatro primeros en La Liga. Sí, está en puestos Champions League, mal que les pese a muchos.

El encuentro arrancó en el Metropolitano con el conjunto de Simeone dominando en los primeros compases. Una intensidad que igualó el Elche a los diez minutos de partido, viendo unos primeros minutos igualados. Al menos, más de lo que se podía pensar en un primer momento. Tras esta igualdad, Morata empezó a decantar la balanza a favor de los colchoneros en uno de sus mejores partidos desde que llegó al Metropolitano. Y pudo hacer el primer tanto de la noche, tras un pase de Carrasco al interior del área pequeña, pero su remate se marchó desviado por poco. Un Morata que, junto con Joao Félix, estaban siendo lo más destacado del equipo. Y al borde del descanso, el internacional español recibió una falta al borde del área que no señaló Cuadra Fernández. Sin embargo, segundos después y tras el aviso del VAR, se fue a ver la acción. No por penalti, sino por una potencial expulsión, y es que Gonzalo Verdú era el último hombre y así lo consideró tras la revisión. Justo antes del descanso, el Elche se quedaba con uno menos.

La calidad se impuso con goles

Con esta superioridad numérica, el Atlético buscó las cosquillas al Elche para despedir el año ganando en Liga. Llegaban las ocasiones pero se resistía el gol cuando, en apenas dos minutos, Hermoso vio dos amarillas seguidas y fue expulsado. Se igualaban las fuerzas después de que el central fuera al suelo para quitar el balón a Palacios, pero midió mal y vio la segunda tarjeta. También con diez, parecía que la cosa se complicaba. Fue ahí con apareció la conexión Griezmann – Joao Félix y el portugués abrió el marcador en el Metropolitano. Llorente centró raso para el disparo de Griezmann, que despejó la zaga ilicitana. Pero le llegó el rechace, no dudó y le puso un centro perfecto para que Joao solo tuviera que poner la cabeza.

Tras el gol y debido a la expulsión, el Cholo dio paso a Reguilón, que entró silbado por su pasado madridista. Con el gol, el Atlético dominaba pero debía buscar un gol más que diera tranquilidad al Metropolitano. Todo por evitar sorpresas, como la que pudo dar Pere Milla. El jugador visitante recibió un centro lateral que cabeceó picado, pero se le marchó fuera por muy poco. Y justo después, Morata metió sin querer, tras una gran jugada personal y dio tranquilidad y la victoria al equipo. Un final en el que Oblak apareció para dejar su parada de servicio para la causa y con un segundo expulsado en el Elche, Quina, similar a la de Hermoso con dos amarillas en un corto espacio de tiempo.