CRÓNICA. Garra, trabajo y tres puntos en Balaídos

CRÓNICA. El Atlético venció en un día donde el Celta puso las cosas difíciles pero donde el cuadro del Cholo sacó su garra.

El Atlético supo sufrir en un día donde Luis Suárez puso el primero en un duelo donde el cuadro de Simeone aguantó. Con garra, el equipo acabó haciendo el segundo en un día donde Diego Costa acabó lesionado.

Koke comandó al Atlético en el regreso a la competición. Y es que nada más empezar el partido Koke filtró un balón precioso que acabó en el primer tanto del partido. El capitán encontró a Costa, que se la dejó de primera a Manu Sánchez quien vio a Luis Suárez, solo, que no perdonó en el borde del área pequeña. Se adelantaba el equipo que no juega a nada y en el que Koke ralentiza al juego. Pero un día más, el fútbol le volvió a dar la razón a Simeone. Otro que tampoco sabe. Y sin más imágenes para la afición en forma de nuevos fichajes, llegó la enésima oportunidad de un Lemar que se mostraba proactivo. Lo intentaba, buscaba el desborde y combinar con un joven Manu Sánchez que mostró desparpajo. Sin embargo, con el correr de los minutos el Celta buscaba rehacerse y probaba a Oblak por medio de Iago Aspas. Sin grandes problemas, el Atleti mantenía la victoria.

«El Celta se rehacía de su mal inicio y comenzaba a intimidar con mayor ahínco a Oblak. Y es que el esloveno se convertía un día más en el mejor del equipo»

Con la dupla formada por Costa y Suárez arriba, el Atleti tenía una gran presencia en ataque, mientras que en defensa sufría bastante más. Hermoso estaba fuera de juego y esto llevó a la ocasión más clara por parte del cuadro vigués. Una internada por la izquierda acabó con el golpeo de primeras de Carreira que se topó con la madera. El Celta se rehacía de su mal inicio y comenzaba a intimidar con mayor ahínco a Oblak. Y es que el esloveno se convertía un día más en el mejor del equipo, mientras Lemar buscaba en ataque un desborde que llevase el segundo tanto colchonero al luminoso. Y eso pudo pasar en un balón a la espaldade la defensa en donde Costa no consiguió controlar el esférico, antes de caer derribado en el área. Lo revisó el VAR, pero el pequeño contacto no sirvió para señalar pena máxima.

TITULAR

El segundo tiempo arrancó como el primero, con un Koke diferencial que buscaba la espalda de la defensa. La primera se marchó larga y no llegó Costa, pero la segunda encontró al de Lagarto que se la dejó a Luis Suárez, que falló en el mano a mano. Y justo en esa jugada, Costa se echó la mano atrás y pidió el cambio. No podía continuar y una lesión muscular se avecinaba en el primer duelo del tourmalet de siete que se avecina en los próximos días. Tras su lesión, Joao Félix entraba en su lugar en una sustitución que llevó al verde también a Felipe, en lugar de un buen Manu Sánchez. El partido se trababa en el medio del campo, con menos ataques por parte de los dos equipos. Era el turno de las imprecisiones por parte de ambos equipos, y el partido se podía decidir por ahí. El Atleti perdía presencia en el medio del campo y para ello el Cholo movió ficha, dando paso a Llorente y Carrasco. Se marchaba el goleador, Luis Suárez, y un buen Lemar.

«El parón de selecciones hacía mella en un equipo que veía como, en un partido, perdía dos efectivos»

El Atleti hacía lento el partido y lo intentaba por medio de Joao Félix, que pese a tener poca presencial buscaba hacer alguna de las suyas. Y al igual que el cuadro colchonero lo intentaba por medio del portugués, el Celta lo hacía por medio de Iago Aspas. Y en la primera que pudo se marchó el de Moaña, que vio como se el echó encima Felipe. Falta táctica del brasileño, que sin querer pisaba el tobillo del delantero vigués. A la salid de un córner, y tras un error rojiblanco, el Celta tuvo la ocasión más clara en un rechace que acabó en las manos de Oblak. Buscaba el empate el Celta, mientras que el Atleti esperaba la aparición de alguien. Ahí llegaba el turno de Llorente, que a la media vuelta hizo intervenir al meta rival. Un golpeo que Iván Villar sacó bien abajo justo antes de que el Cholo metiera más madera al medio del campo.

Héctor Herrera entraba en el lugar de Correa con cuarto de hora para el final. El partido entraba en su recta final y el Atleti aguataba atrás, cuando Torreira no podía más por los calambres y sufría para aguantar los últimos minutos. Murillo la tenía con un cabezazo que se marchó rozando la cepa del palo de Oblak cuando Torreira llegaba al límite. No podía más el uruguayo que dejaba el equipo con diez.  El parón de selecciones hacía mella en un equipo que veía como, en un partido, perdía dos efectivos. Sin embargo, la garra charrúa le impedía quedarse fuera del campo y volvía, aunque fuera para estorbar. Llegaba el tiempo de descuentos, de seis minutos, y con el Celta en busca del empate. Tocaba apretar los dientes y aguantar. Y así lo hizo el Atleti, que sentenció el partido por medio de Joao. Pese a su intermitencia, se sacó un zurdazo para toparse con el larguero. Pero aprovechó el rechace Carrasco, quien sentenció de cabeza para hacer el segundo gol.

El Atleti sumaba tres puntos cruciales en un día trabajado, que dejó buenos minutos de Torreira y un muy buen encuentro de Koke. La cara negativa, la lesión de un Costa que mostraba un buen nivel.

Deja una respuesta