Un Metropolitano que se asemejó al Vicente Calderón

El Estadio Metropolitano vivió su mejor noche. La cita merecía la pena, y el espíritu del Vicente Calderón se apropió del nuevo feudo rojiblanco. Y es que, desde las siete de la tarde, la previa recordaba a las vividas en el antiguo estadio colchonero. Un día en el que el espíritu del Vicente Calderón llegó a los cimientos del Metropolitano. Donde los colores recordaron a la cita de las grandes noches. Donde las voces se afinaron y acompasaron a los suyos en un día en donde el infierno fue rojiblanco y allí todos cayeron rendidos a sus pies.

Y es que, la Avenida Luis Aragonés se tiñó de rojo en un día en el que las bengalas y la gente hicieron la llegada del bus un inicio diferente. El partido arrancó a las siete. La previa era diferente, y todo empezaba a calentar. Todo cambió en el momento en el que ambos equipos salieron del túnel de vestuarios. Tras un calentamiento de ánimos constantes, llegaba el pitido inicial. Pero antes, el Vicente Calderón daba la bienvenida a los suyos. Bajo el lema «Atlético de Madrid» y un oso como estandarte, el partido estaba a punto de comenzar. Pero no solo eso, y es que dicho tifo rememoraba el viejo estadio. Azul en la primera tribuna, y rojo y blanco en las de encima. Y es que, el Calderón no fallaba.

Tras el tifo, uno de los más bonitos de los últimos años, el Calderón no cedió en una gran noche. Desde las siete de la tarde de un día que estará en la historia del Atlético de Madrid. Y es que, más allá de la victoria, los atléticos la recordarán por un día en el que la Familia no falló. En el que todos unidos llevaron a su equipo en volandas.