28 abril, 2024

Griezmann y Oblak dan alas para volver a ganar

Derbi madrileño en busca de la victoria. Tras dos partidos ligueros perdiendo, el Atlético de Simeone quería vencer ante un Rayo necesitado de puntos. Vallecas no defraudó a los suyos. La tarde del sábado podía dejar malas sensaciones de cara a la Juve, pero una victoria podría darle un plus de motivación tras las malas sensaciones de las últimas semanas.

Arrancó el duelo y el Atlético parecía que quería hacerse con el control del balón. Tal fue el inicio que Saúl cabeceó desde el punto de penalti pero su testarazo se marchó por encima de la madera. Buen inicio de un Atlético que quería encontrarse con el gol. A partir de ahí, todo cambió. Ni presión, ni velocidad, ni querer marcar. El Atlético necesitaba ganar, pero la intensidad del Rayo era superior a la de un Atlético sin alma. Griezmann estaba desaparecido, y tan solo Rodrigo era el único que mostraba algo de acierto a la hora de buscar el gol. Pero también acertaba Oblak para evitar los del Rayo Vallecano. Embarba probaba con un disparo cruzado que no pilló desprevenido al meta esloveno.

El Atlético quería responder tras un transición largar del esférico. Y en una jugada ensayada, Filipe puso el balón que se paseó en el área pequeña y ni Godín ni Morata consiguieron enviar a línea de fondo. La única clara de toda la primera mitad, no como el Rayo que pese a su inferioridad en cuanto a atacar se refiere, lo intentó en contras esporádicas. Embarba volvía a intentar sorprender a Oblak, pero fue Raúl De Tomás quien por casi lo consiguió. Un remate cruzado batió al esloveno pero el esférico se marchaba por línea de fondo.

Nada cambió en el inicio de la segunda mitad. Los minutos pasaban y las ocasiones no llegaban. Por ello y a los diez minutos de segunda mitad el Cholo movió ficha. Correa y Vitolo, que no tuvieron la incisión esperada, se marcharon del terreno de juego. Lemar saltó al campo y la ‘Pantera’ Costa volvía al verde. Tras varios meses lejos de los terrenos de juego, llegaba con más fuerza que nunca. Media hora por delante y un objetivo, volver a morder. Volver a dar un zarpazo de los suyos. Pero quien lo dio, si encontrar carne, fue el Rayo. Gálvez encontró en la espalda de Giménez a Raúl de Tomás, pero ahí estaba Oblak. Controló y golpeó el delantero vallecano, cuando apareció la manopla del esloveno. Evitaba que los locales se adelantaran en el marcador.

Poco más de cuarto de hora y finalmente, sin merecerlo, el Atlético conseguía el gol. Un centro lateral le cayó a Morata que, con mucha pausa, se la dejó a Griezmann. El galo remató con la zurda y con un pellizco de suerte, tras un rechace, entró al fondo de la red. El Atlético se adelantaba en Vallecas. Costa da otro aire al Atlético. Da garra, da pundonor y sobretodo genera miedo. Mucho miedo. Tras el gol el Cholo metió mucha gente atrás dando paso a Savic en lugar de Rodri. Se reestructuró el equipo colchonero en busca de tres puntos cruciales. Pasaban los minutos y el Rayo no quería rendirse. Con todo casi acabado, Ba pudo hacer el empate. Un centro lateral lo remató el central con un gran testarazo que salvó Oblak. Voló el esloveno para sumar tres puntos cruciales.

El Atlético de Madrid suma tres puntos claves para ahora ponerse a pensar en la Champions. Pese al mal partido en cuanto al juego se refiere, el equipo de Simeone consiguió sumar tres puntos gracias al tanto de Griezmann.

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