12 mayo, 2024

Contracrónica: «Principios»

Abultada derrota del Atleti en Dortmund en un partido que alternó fases de buen juego rojiblanco con una preocupante fragilidad defensiva.

Les confieso que siento tal desconcierto que me cuesta saber por dónde empezar en estos momentos en los cuales es tan difícil distinguir qué es el principio. No recuerdo un ejercicio mayor de incongruencia futbolística en un Atleti entrenado por Simeone. Quizás podríamos comenzar por la fragilidad mental de un equipo que en los últimos 7 años ha sido una roca lloviera, nevara o granizara. O por la incapacidad para encontrar el último pase y con él el camino del gol. O por la falta de solidez de medio campo para atrás. También podríamos empezar por la alarmante falta de forma de jugadores como Juanfran, Filipe, Godín, Koke, Thomas, Lemar, Griezmann o Costa. Podríamos empezar diciendo que se alternaron momentos de gran fútbol durante los 20 primeros minutos de la primera parte o tras la entrada de Rodri y el adelanto de posición de Saúl en la segunda hasta que éste fue sustituido incomprensiblemente cuando mejor estaba.

Foto: Atlético De Madrid

Puede que el principio de todo esté en una crisis de identidad de un equipo que no sabe si atenerse a sus señas de identidad reconocibles o jugar a lo que los demás pretenden que juegue. Puede que esa crisis de identidad sea consecuencia de la inexorable ley natural del paso de los años sobre símbolos incontestables a los que les empiezan a apretar las costuras que el tiempo y las batallas vividas marcan hasta en las pieles más curtidas.

Todo ello debe dar paso a una profunda reflexión entre todos que lleve a dejar de dar palos de ciego buscando una identidad perdida por momentos y a caballo entre el pasado y el presente. Uno, que es optimista por naturaleza, piensa que en la desesperación vivida ayer tras el primer gol del Borussia Dortmund, quizá se haya dado con una de las posibles soluciones: Rodri y Koke en el mediocentro con Saúl más adelantado. En esos minutos tuvieron lugar cuatro llegadas clarísimas, de las que en tres Saúl fue protagonista. El error de Simeone con su sustitución provocó la evidencia de todas las miserias padecidas por el equipo en este momento, como son la inexistencia de laterales de garantías y la falta absoluta de soluciones y fantasía por parte de Griezmann y Lemar.

Como vemos, anoche principios hubo muchos, pero final solamente hubo uno y conocido por todos. Toca ponerse manos a la obra para empezar a cambiar esos principios para que cambie también el final. Aún es pronto para hacerlo.

Deja una respuesta