13 mayo, 2024

61 puntos después de 26 jornadas. Casualmente los mismos puntos tras las 26 primeras jornadas de la Liga 2013-2014. Todo ello sin haber podido hacer incorporaciones hasta enero, con tu estrella perdida en frivolidades durante la primera vuelta y con varios otros que ya habían decidido de antemano dejar de sumar, a lo que hay que sumar la reciente pérdida de efectivos en la plantilla sin posibilidad de reemplazo en estos momentos. Aún así, el peor Atleti de la era Simeone, ese que aburre a las ovejas, que debería estar peleando de tú a tú con aquellos que te triplican en recursos o que solamente sabe marcar un gol y echarse atrás, es el único en seguir la estela de un Messi intratable que aún no conoce la derrota en esta Liga y está muy por delante del otro equipo oficial de la galaxia. Lo cierto es que estos últimos días todos aquellos que pregonaban que el Atleti aburría están ahora muy callados.

FOTO: LaLiga
FOTO: LaLiga

Otra de las certezas que el equipo está constatando es que, un año más, llega en su mejor versión de la temporada al afrontar el mes de marzo. Jugadores como Saúl, Filipe o Koke, que han venido atravesando diversos problemas de lesiones o de juego recientemente, ahora van como aviones. Especialmente el vallecano, al que no se le suelen permitir bajones, y que ayer ofreció un curso intensivo lo que tiene que ser un todocampista, regalando una asistencia de fantasía a Griezmann en el 1-0 y otra a Diego Costa que no fue gol de milagro. Mientras tanto, Thomas sigue opositando a convertirse en el 5 que tanto tiempo hemos buscado y los de arriba siguen a lo suyo, que es destrozar defensas. De Diego Costa ya no sé qué mas decir… Es sangre, instinto, rabia, un suplicio para el rival. Puede que no sea el mejor delantero del mundo, pero sí es el mejor delantero para el Atleti y le hemos echado mucho de menos estos 3 años y medio que no ha estado. Uno no puede evitar pensar dónde estaríamos ahora de haber contado con él desde el 1 de agosto… Y si me apuran, qué habría ocurrido con él en el campo en Lisboa o incluso en Milán. Efectivamente, ahora esto no viene a cuento, pero no se puede evitar… Como tampoco tiene palabras lo de Griezmann, que es otro desde que precisamente tiene a Costa al lado. Lo de los dos últimos partidos ha sido escandaloso, haciendo lo que le ha dado la gana. No obstante, quiero pensar que su cambio de actitud va algo más allá y obedece a que ha dejado de hacer caso a los cantos de sirena. Veremos lo que depara el futuro, pero su predisposición y sus palabras al finalizar el partido invitan, como mínimo, a ser optimistas. Eso sí, prepárense porque de aquí al domingo se avecina tormenta mediática desde Barcelona a vueltas con Griezmann. Que si le reservan el 7, que si le están esperando, que si ya tiene casa allí… Nada que no conozcamos ya. En lo que se refiere al partido, toda la ilusión del mundo. Hay que ser conscientes de que incluso ganando allí, ellos tendrían aún una buena ventaja, pero también es cierto se percibe cierto miedo desde allí. Desde los desesperados intentos por provocar amarillas para quedar limpios, hasta las quejas por tener un día menos de descanso. No me extrañaría que Xavi Hernández volviera a subirse a su púlpito particular para pontificar sobre la verdad única del fútbol, desdeñando todas las demás posturas. Como dice Simeone, la verdad absoluta en el fútbol no existe. Pero es curioso que, a pesar de todos los palos propios y ajenos que le dan, cuando llega el mes de marzo los hechos siempre le terminan dando la razón… y puntos. Ya van 61.

Deja una respuesta