El Atleti cumple con sus deberes.
Vuelve la puesta a punto del Atlético de Madrid, en este caso nos enfrentamos al Real Oviedo en el Carlos Tartiere. Un partido con mucha historia y en un día especial, día en el que Luis Aragonés cumpliría su 77 cumpleaños, ¿casualidad?.
El Atlético de Madrid llegaba a la ciudad Asturiana tras unas duras semanas de entrenamiento en Los Ángeles de San Rafael y tras ganar el último encuentro en Burgo de Osma frente al Numancia que ganamos por dos goles a cero. El partido comenzó con: Oblak; Juanfran, Lucas, Savic, Siqueira; Tiago, Gabi, Koke, Carrasco; Griezmann y Vietto.
El Atleti comenzó dominando el balón pero sin crear mucho peligro de cara a la portería que defendía Esteban. Koke era el más participativo del equipo, aunque Vietto y Griezmann no dejaban de hacer el desmarque y moverse. El equipo contó con varias ocasiones para ponerse por delante, pero no llegó hasta el minuto 28, cuando Antoine Griezmann hizo el primero tras un gran pase al hueco de Luciano Vietto. Unos minutos después la tuvo el Oviedo por medio de Linares, tras un error defensivo de Savic, pero respondió muy bien en el mano a mano Jan Oblak. Y así concluyó la primera mitad sin muchas más ocasiones.
Comenzaba la segunda mitad sin ningún cambio en el Atlético de Madrid. Ambos equipos mantenían el balón pero sin crear mucho peligro en ambas porterías. Tocó el turno de los cambios, Simeone dió minutos a Fernando Torres, Correa, Óliver, Saúl, Gámez y Raúl García. Y pocos minutos después llegó el segundo gol al marcador, tras un disparo de Raúl García que fue rechazado por Miño, Fernando Torres empujó el balón al fondo de la red.
El equipo siguió buscando la portería pero sin fortuna, la tuvo por medio de Fernando Torres que cedió el balón a Ángel Correa pero el balón se marchó por la línea de fondo, pero el resultado no se movió hasta el pitido final.
Tras finalizar este encuentro, el equipo viajará a Japón y China para seguir con la pretemporada y disputar sus dos próximos amistosos.
