OPINIÓN. Año tras año el Atlético de Madrid crece en lo deportivo por sus buenos resultados tanto a nivel Europeo como a nivel nacional. Este crecimiento de Septiembre a Mayo es obra de Diego Pablo Simeone que logra sacar lo mejor de una plantilla de menos nivel que la de otros titanes europeos. En estos meses, pese a dificultades, el equipo dirigido por el bárbaro argentino aumenta sus ingresos económicos, aumenta en todos los rankings de la UEFA y de la FIFA y aumenta su prestigio como club para poder atraer posteriormente a más jugadores de talla mundial en el mercado estival.

Antes de empezar el mercado de fichajes, como es normal, todos nos hacemos ilusiones con refuerzos de nivel para poder afianzarse en la élite europea y poder meterles mano a los dos gigantes del fútbol español que disponen de muchos más recursos que el resto de conjuntos. Verano tras verano se habla de piezas pedidas por SImeone para poder competir a mayor nivel, como es con el caso de Diego Costa, pero en estos meses donde no aflora el fútbol y tiene que salir a relucir los esfuerzos de la directiva, siempre o casi siempre nos quedamos con la miel en los labios. Por una cosa o por otra las primeras espadas pedidas nunca llegan o en caso de llegar siempre se incorporan al grupo tarde porque el fichaje se ha acometido más tarde de lo habitual, finalmente no pueden realizar la pretemporada con el grupo y tienen que sufrir un proceso de adaptación más largo de lo COMÚN.
En estos casos siempre aparecen los «Voceros oficiales» para hablarnos de esfuerzo titánico del club para acometer ciertas operaciones o en consecuencia para lavarnos la mente contando que el jugador en cuestión no ha dado un paso al frente para llegar al club de la Ribera del Manzanares. Una historia más que conocida para todo seguidor rojiblanco, ya no cuela. Además de aumentar en lo económica mediante éxitos deportivos, el Atleti es uno de los clubes que más dinero saca en ventas año a año, siempre oscila entre los 60-100 millones ingresados por venta de jugadores. En lo que llevamos de mercado ya se han recaudado 62 millones (Moreira-Theo-Oliver) y por lo que parece la directiva no está dispuesta a pagar en torno a 50-60 millones por Costa cuando tiene la capacidad financiera suficiente para poder costear una operación por un jugador que quiere jugar sí o sí en el Atlético de Madrid y ha hecho todo lo que está en su mano para venir.
Con TAS o sin TAS, cada verano, la directiva, dirección deportiva no son capaces de cerrar fichajes cuando se deben ejecutar. Las operaciones se te complican siempre por no realizar el fichaje en cuestión cuando se debe y se vive a expensas de movimientos de otros clubes para poder reforzarte. Mentalidad de equipo muy pequeño. Así es difícil afianzarse por no decir que imposible cuando un equipo top 5 europeo en la actualidad se comporta como un club que lucha por salvar la categoría.
En definitiva los que deberían hacer el camino más fácil hacen todo lo contrario. Poner trabas deportivas que el majestuoso Simeone tiene que esquivar y sobreponerse a ellas. Con o sin TAS, cada verano, paso atrás.