
FOTO: Diario AS
Corría el año 2007…para ser más exactos era un 5 de diciembre del año 2007, de hace ya unos cuántos años…10, para ser más exactos. El Atlético de Madrid era un club mucho más humilde que ahora, qué duda cabe. No teníamos el mismo capital que ahora, no teníamos los mismos futbolistas que ahora, no teníamos los mismos títulos que ahora, y ni siquiera competíamos con los grandes del continente.

Os solicito, por favor, que hagamos un esfuerzo memorístico y viajemos 10 años atrás. Inténtenlo. Yo retrocedo en el tiempo y me encuentro con un chaval de no más de 8 años pegado a la tele con cara de bobo y con una camiseta rojiblanca. Ese chavalín era yo, y mientras todos mis colegas visionaban como locos la Champions League para ver a sus equipos favoritos (véase Madrid y Barca), yo pasaba las horas viendo otra competición que ya ni existe: la UEFA. A mí me decían que qué era eso, que por qué veía tal competición, que por qué no me cambiaba de equipo, mofas, risitas…nada nuevo, supongo que alguno habrá pasado por lo mismo. Pero es algo que se lleva por dentro, tanto en lo bueno como en lo malo. Y no hay nada que esconder, siempre estaré orgulloso, y no se confundan, no es conformismo, no. Es agradecimiento, porque este equipo me ha hecho saltar de alegría, llorar de desesperación, ilusionarme para luego bajarme de las nubes, pero sobretodo me ha hecho sentir amor. Amor por unos colores, por un escudo. No quiero que se confundan, no es fanatismo, es pasión.
Y mañana volvemos a los orígenes. Donde todo empezó a coger forma. Primero con Quique Sánchez Flores y luego con el ‘Cholo’. Volvemos donde empezó, la actual Europa League. Terreno donde hemos disfrutado, crecido y levantado títulos. ¿Y por qué no soñar? Sigamos. ¿Hemos caído? Sí. ¿Deberíamos estar en Champions? También. ¿Nos venimos abajo? Jamás. Estamos aquí, por tanto vamos a luchar por ello.
El caso es que aquel día, quiero recordar, nos enfrentamos en dicha competición contra el Copenhague, nuestro rival de hoy. Y lo hacíamos con jugadores como Abbiati, Thiago Motta, Forlán, Maniche…qué tiempos aquellos, ¿eh? Y ganamos, 0-2. Una victoria con claridad ante un rival bastante inferior. Y marcaron Sergio el ‘Kun’ Agüero y un tal Simão Sabrosa, ¿se acuerdan? Yo sí, y eso era Atleti.
No sirvió de mucho esa victoria, ni tampoco el primer puesto del grupo que conseguimos. Nos quedamos sin estar presentes en las rondas finales. Pero ahora las cosas han cambiado. Ahora somos otro equipo totalmente distinto, aunque mantenemos nuestra esencia. Y nos volvemos a cruzar contra el Copenhague, en el mismo sitio que aquel 5 de diciembre de 2007 y con la misma aspiración que cada vez que saltamos a un campo: ganar.