Diego Pablo Simeone atendió a los medios de comunicación a la conclusión de un partido en donde se demostró el sentir atlético. El técnico argentino se hizo de rogar y es que mientras los aficionados blancos se refugiaban de la lluvia y esperaban a que sus jugadores saliesen (un centenar de personas apenas), Simeone y sus jugadores aplaudían a los miles de aficionados que se encontraban en las gradas del Vicente Calderón cantando a los suyos, bajo el diluvio, como si el billete a Cardiff se hubiese conseguido. Pregúntense ahora qué se siente.

Simeone comenzó hablando del porqué estaba sonriente cuando salió a la sala de prensa del Calderón: “Estoy feliz, orgulloso, competimos una vez más, demostrando por qué hace cinco años y medio luchamos en los mejores lugares, detrás de Madrid y Barcelona, que son los que te encuentras luego. Teníamos un resultado durísimo, decíamos que se podía y algunos creían que era un juego de palabras. Los primeros 35 minutos quedarán en la historia para la gente. Quedamos afuera, aprovecharon un desorden defensivo nuestro, es un gran rival… Estas noches mágicas que pasaron por el Calderón quedarán para siempre en el recuerdo”.
Seguidamente fue cuestionado por el qué sentía tras tener que volver a salir al campo, ante sus aficionados bajo el diluvio que cubría Madrid: “Que dimos todo, hace seis años que estamos dando la vida. Lástima que no podamos clonar a algunos futbolistas, lo necesitaríamos, el año que viene igual ya no rinde igual. Me sigo emocionando todos los días, como planteamos el partido ante un todopoderoso Real Madrid, campeón del mundo, de Europa, primero de la Liga…. Una pena, necesitamos seguir creciendo, el paso no es pequeño, es grande si aprendemos y crecemos a partir de esto que ese hizo, el futuro será alentador”.
En Milán Simeone señaló que tenía que pensar, tras lo de hoy dijo: “No pienso en eso, soy espontáneo y dije lo que pensaba. Hoy siento lo que les cuento. Es un éxito del club estar ahí, lleva cinco años más otros dos antes peleando arriba, un crecimiento enorme, pero le faltan pasos, y hay que darlos”. En la misma línea habló sobre las posibilidades de seguir creciendo: «Tenemos que clonar algunos jugadores primero. Los corazones de algunos futbolistas son tan grandes, que empujan a los compañeros… No es fácil sostenerse, pero es un día importante más allá de haber quedado eliminados. Si analizas lo que tenemos por delante, se puede mejorar”. En referencia a la clonación de jugadores, fue cuestionado por qué jugadores son esos de los que habla: “No lo puedo decir, pero son bastante inteligentes ustedes para darse cuenta”.
Como no podía faltar, Simeone habló del Calderón y las emociones en la última noche de gala europea en el templo: “Las emociones se transmiten, esta gente que estaba aquí estará en el Metropolitano. Ya pasamos al Calderón y el Metropolitano será lo mismo. Su pasión y su entusiasmo no se negocia. El Metropolitano será nuestra casa”.
Con respecto al partido, habló del cambio del equipo tras el segundo gol de Griezmann: “El esfuerzo se paga y los primeros 25 minutos es difícil sostenerlos en el ritmo, y enfrente hay un equipo con una jerarquía tremenda que al primer error te marca. Fue un primer tiempo casi perfecto que una jugada extraordinaria de Benzema estropeó. Esto e sel fútbol”. Para concluir habló sobre sí hubiese estado bien llegar cero dos al descanso y haber aguando el uno cero del Bernabéu: “Dentro de las críticas que me hago, pude ser, sí, pero si no busco el gol me dicen que por qué no voy. Es le fútbol. Vas o vas o no vas. Fuimos, pero no creo que por ir nos desconcentráramos. Los tres goles del Bernabéu nos hicieron daño y dirán que por eso perdimos la eliminatoria”, concluyó
