No pudo darse el milagro, el Atlético de Madrid lo intentó por activa y por pasiva, pero no pudo ser. La suerte no estaba de su lado, además de no depender de ellos mismos para pasar a octavos de final mirando de reojo el partido del Qarabag – Roma en el Estadio Olímpico con los italianos adelantando su marcador, el Chelsea empataba el tanto de Saúl con un gol en propia puerta de Stefan Savic.
Tras concurrir los 90 minutos, el portero Jan Oblak, (pudiéndose decir que fue el mejor jugador del partido luciéndose con paradas increíbles que salvaban a su equipo de más de un gol), compadeció al micrófono de Susana Guasch: «Duele haber quedado fuera, ha sido un golpe muy duro. Estamos tristes pero hay que vivir con ello, en algunos partidos no estuvimos como debimos estar«, eran las primeras palabras del desanimado cancerbero valorando la dura eliminatoria en fase de grupos.
Como el esloveno añadió: «Hay que seguir adelante y continuar con la temporada», no le queda otra al Atlético de Madrid, mirar hacia la Liga, que aún sigue viva para los rojiblancos (a 6 puntos del líder); Copa del Rey (esta misma mañana hemos conocido el rival en octavos, el Lleida); y ahora, la Europa League: «Hay que ir a por la Europa League a pesar de que no fuera nuestro objetivo, pero en todas las competiciones en las que juegas lo haces para ganar».
Hablando sobre la reacción del vestuario tras el partido, el guardameta reconoció el bajón del grupo y dijo: «Tenemos que levantarnos y seguir trabajando. Este fin de semana hay otro partido. Nos duele haber caído en Champions que es nuestro mayor objetivo y siempre hemos solido llegar lejos».
Finalmente, la reportera felicitaba a Oblak por su magnífica actuación durante el partido y éste trató de quitarse méritos: «Todo el equipo hemos trabajado mucho, es normal que en algún partido un jugador destaque mas que otro, pero somos un equipo y todos queremos lo mejor para la plantilla», eran las humildes palabras del, aunque a muchos cueste reconocer, mejor portero del mundo.
