En el día de ayer el club rojiblanco dirigido por Diego Pablo Simeone consiguió tres puntos más en la liga. No obstante, el runrún de que el Atlético de Madrid no juega sigue ahí. Cabe decir que ello no es falso. El equipo de ‘El Cholo’ parece no carburar en el medio del campo sobre todo cuando falta Koke. En defensa seguimos siendo el equipo sólido que acostumbramos ser pero en ataque somos un conjunto sin ideas, sin finalización, sin gol. Para ganar un partido hace falta solo un gol y que el rival no marque y hoy ha sido así, no obstante (y al pasado me remito) si te empatan en el último suspiro el tiempo se te vuelve en contra.

Hoy el Atleti quiso salir con la misma mentalidad de conseguir un gol y dejarle el balón al rival ya que es donde más cómodos parecen sentirse los nuestros. Simeone salió con el muro personificado, Jan Oblak. Por delante de él se observaba un 4-4-2. Está formación podría decirse que es la que se veía claramente en defensa en la primera parte sin embargo, añado que fue la única que se pudo evaluar. Juanfran, Savic, Godín y Lucas fueron la primera línea de contención a partir de la cual erradicaba todo lo demás. Los dos laterales sin profundidad en ataque, sin ninguna aportación en esta faceta y los dos centrales limitados a achicar balones. Delante de ellos tenían a Pione Sisto, Maxi Gómez e Iago Aspas (uno de los mejores tridentes y más en forma de la liga). En la medular de nuestro club se situaban Gabi, Thomas, Saúl y Correa. Los dos primeros que trataban de cortar cualquier posibilidad de ataque celtiña por el medio y los dos últimos los encargados de crear el juego y llevar la batuta colchonera. Quizás más Saúl que Correa, no obstante, el argentino llevaba el peligro (si lo hubo) al área rival. Por arriba estarían Gameiro (goleador de hoy en el rechace de un córner tras 25 minutos horribles del Atleti) y Griezmann, el cual anda un tanto desaparecido. En la segunda mitad el Atleti se echó atrás. El equipo vigués tuvo mucho más peligro y es que Simeone lanzó a sus jugadores atrás dando entrada a Giménez por Gabi. Antes dio otra oportunidad a Gaitán el cual no hizo tampoco más de lo que ya se veía en el campo. Griezmann se quedó delante solo tras haber sustituido el argentino a Gameiro. Los otros 9 futbolistas de campo estarían detrás de él rechazando las acometidas del conjunto de Unzué. Se veía muy claro que el Atlético jugaba con un 5-4-1 dejando a Thomas y Saúl por delante del uruguayo Giménez y a Correa escorado a banda y a Gaitán en la otra aunque con perfiles defensivos.
Tres puntos más para el casillero. El Atlético de Madrid parece estar mal pero está cuarto a un punto del tercero y a dos del segundo. Ha jugado seis partidos de visitante y solo tres de local. No ha perdido ni un solo encuentro y tan solo ha encajado cinco goles. Buenos números aunque lo que se critica en parte de la afición rojiblanca es la poca participación ofensiva que hay.