 
        Foto: CD Ursaria
Empate de peso y sin goles para un Atlético B al que solo le faltó ver portería ante el Ursaria. Un punto para seguir arriba en la tabla clasificatoria y con la necesidad de volver a ganar, ahora en el Cerro.
El Atlético de Madrid B afrontaba su primera salida del curso en la Tercera RFEF tras un debut de categoría. Un encuentro ante el Ursaria en el Municipal de Cobeña, donde el Atlético B sufrió para hacerse con la posesión del balón. Un inicio de partido esperado, ante un césped artificial que no es habitual para el filial colchonero y con un rival muy complicado en frente. Pese a esa incomodidad provocada por el Ursaria, el conjunto que juega en Cobeña no intimidó la meta de Christian con ocasiones claras de gol.
Pese a sentirse incómodo, el Atlético B intentó acercarse a la portería rival a balón parado. Primero lo intentó Jordi Ferrer, que con un buen cabezazo puso en problemas al ex-atlético Carlos Morales. Despejó con dificultades un cabezazo perfecto de Jordi a un buen centro de Camus. Con el Atlético B mejor plantado en el terreno de juego, intentó seguir asediando la meta del Ursaria ahora con una gran jugada trenzada. Jugada que acabó con un disparo en la frontal de Sergio Guerrero, que atajó en dos tiempos Carlos Morales, para mantener el empate a cero en el marcador.
INTENSIDAD SIN GOLES
El segundo tiempo el Atlético B se mostró más incisivo y Giuliano Simeone pudo adelantar al filial. Nada más comenzar una gran internada de Davo por la derecha permitió al argentino rematar, pero se marchó por encima del larguero. Siguió apretando el equipo de García Tevenet, ahora por medio de Camus, que lo intentó desde fuera del área sin fortuna. El técnico colchonero buscó dar mayor presencia al equipo por medio de Teddy, algo que no permitía salir al Ursaria de su campo. La más clara la tuvo Jordi Ferrer, con una media chilena que se marchó rozando el poste de la portería de Morales. Los intentos no surgieron efecto y el filial sacó un punto que acabó sabiendo a muy poco.
Un Atlético de Madrid B que fue de menos a más ante un Ursaria que acabó resistiendo con un Carlos Morales de categoría, mostrando lo aprendido en La Academia y la categoría de portero que es.

 
         
        