La RAE, en su decimoprimera accepción, la cual se inventa un servidor, reza Atlético de Madrid. Pero Atlético de Madrid, no sin sufrir en Valladolid, lleva en su definición CAMPEÓN DE LIGA. Y sí, el equipo de Diego Pablo Simeone, en su lucha contra todo y contra todos, se ha alzado campeón de Liga con 86 puntos. Gracias a Diego Pablo Simeone. Gracias a Koke. Gracias a Saúl. Gracias a Oblak. Gracias a Savic, que ni siquiera jugó. Pero sobre todo, y todavía más importante, gracias a los miles de desplazados a Valladolid.
En lo deportivo, el Atlético tenía claro que sin sufrir no se iba a poder conseguir nada. Echó a rodar el balón y el equipo era un flan. Los nervios estaba más que presentes. Mal colocados. Sin llegar a las marcas. Sin optar a las segundas jugadas. Todo mal. Ante un Valladolid que tenía que ganar y soñar. Un querer y no poder, con nada, y que vio como la situación era aún más peligrosa. El Valladolid se ponía por delante con una contra mortal. Sin embargo, no todo eran malas noticias. Minutos después, el Villarreal se adelantaba y dejaba todo igual. Pero iba a tocar sufrir. Nada salía, el equipo era un flan y estaba muy blando. Solo Luis Suárez, con un golpeo maravilloso, estuvo a punto de hacer el empate, pero un defensor consiguió despejar para evitar el gol. Con esta ocasión del charrúa y la derrota de los dos aspirantes al título, tocaba seguir sufriendo, ahora en el túnel de vestuarios.
Tocaba apretar los huevos y salir a morir. Y así lo hizo, con un Correa que era el más activo del partido. Trabajador, eléctrico, vibrante y desbordante. Sin embargo, fue Giménez quine pudo hacer el empate a lo Godín, con un remate que se marchó alto. Pero fue el de siempre, Ángel Correa, con una jugada de las suyas, magistral y un punterazo perfecto, quien empataba. Tocaba seguir luchando en post de la victoria y así lo hizo. El Cholo y los suyos dependía de sí mismo y trabajaba en base a ello. Y diez minutos después, tras un error atrás, Luis Suárez, en las que a él le gustan, no falló y culminó la remontada. Después, todo es historia. Remontó el Madrid, pero el ATLETI ERA CAMPEÓN.
