
Foto: La Liga
Visita complicada la que afrontaba el Atlético en Anoeta. Tras la derrota de la temporada pasada, los de Simeone querían sumar tres puntos clave para aventajar aún más al Madrid en la lucha por el segundo puesto.
El esférico echó a rodar en el verde de Anoeta con dos equipos muy intensos. Presión alta de los de Simeone y los vascos con el primer córner a favor suyo. En una contra montada por Lemar, Zaldua frenó al galo y vio la primera cartulina del enfrentamiento. Primeros compases de partido, primeros minutos de Atlético de Madrid. Pasaban los minutos y la posesión era txuri-urdin, mientras que los colchoneros buscaban aguantar replegados y hacer daño a la contra. Griezmann y Morata buscaban una presión alta que dejo de ser acompañada por la línea de medios, y el Atleti ya esperaba en su campo a la Real. La primera ocasión la puso Oyarzabal en una acción que, con un disparo desde la frontal, apenas intimidó a Oblak. Los vascos buscaban entrar por banda con dos laterales profundos y que llegaban a línea de fondo. Respondía el Atlético por medio de un Morata que a la aventura se presentó en el área rival, y buscó a Griezmann. El ex jugador realista disparó mordido y sin apuros para Rulli. Pasaron los minutos y comenzaron a llegar las ocasiones más claras.
Koke buscó la espalda de la defensa y en una indecisión, Morata pudo abrir la lata. Se quedó el balón muerto y sin fuerza buscó portería. La zaga txuri-urdin lo evitó casi sobre la línea de gol. Buenos momentos del Atlético por medio de Koke que volvía a conectar con Morata. El delantero remataba muy bien con la punta de la bota pero Rulli se estiraba de muy buena manera para salvar a la Real Sociedad. Mejoraba el Atlético de Simeone que quería encarrilar el partido en la primera mitad. Y así lo iba a hacer. Pasaban los minutos y la pareja Koke-Morata carburara de cara a la portería de Rulli. A la salida del córner Godín peina y Morata, entrando desde atrás, no falla y hace el segundo gol con la elástica colchonera. El balón parado llegaba a Anoeta y lo iba a hacer por partida doble. Y es que en una precisa falta botada por Koke, Morata de nuevo puso la cabeza y volvía a batir al meta local. Segundo tanto del Atlético, segundo gol de Morata ante la Real. El Atlético estaba siendo muy superior y los de Alguacil no sabían como rehacerse a los dos mazazos recibidos. Los vascos estaba noqueados y el Atlético pudo hacer el tercero, pero sin mordiente se llegó al tiempo de descanso.
El segundo tiempo echó a rodar con la incursión de Santiago Arias en lugar de Filipe Luis. El brasileño se marchó por unas molestias musculares. Los de Alguacil comenzaron con la necesidad de marcar pero sin puntería sobre la meta de Oblak. Pasaron los minutos y el Atlético se mantenía muy seguro en el terreno de juego. Pese a ello, el Cholo apuntaló el centro del campo dando paso a Thomas y retirando del terreno de juego a Lemar. Más músculo en un centro del campo en el cual Rodri y Koke tenían una cartulina amarilla cada uno. Y eso iba a pasar factura. Y es que tres minutos después, en una acción por el lateral, Sandro encaró a Koke que le entró abajo y provocó la segunda amarilla del canterano. El Atlético se quedaba con diez y Godín veía la cartulina amarilla. Media hora de sufrimiento en inferioridad numérica. La Real Sociedad comenzaba así un continuo asedio y derribo con el objetivo de recortar distancias. Diez minutos después, sin ninguna ocasión clara para los txuri-urdin, el Cholo realizó el último cambio. Morata se marchó tras sus dos goles y dio paso a Correa con un pensamiento claro. Asegurarse atrás y buscar las transiciones rápidas con el argentino.
Cuarto de hora para el final y Aerolíneas Oblak despegaron en Anoeta. Cabezazo a la escuadra colchonera y ahí apareció el esloveno. Nunca falla el meta colchonero que se mostró soberbio bajo los palos. Correa entró al campo pero apenas tenía la oportunidad para encontrar la meta de Rulli, pero sí para poner nervioso al centro del campo local. Como el gato y el ratón, escondía el balón para evitar que los vascos pudieran buscar la meta de Oblak. Y a falta de cinco para el final Arias pudo poner la puntilla pero la zaga local evitó que el disparo fuera a puerta. A la contra lo intentaron los de Alguacil pero ahí apareció Don Rodrigo, perfecto al corte para evitar la oportunidad de gol de Oyarzabal. Llegó el tiempo de descuento a Anoeta sin ocasiones de claro peligro en Anoeta. El Atlético sentenció en la primera parte y supo guardarse las espaldas en una segunda mitad donde tuvo que jugar con uno menos durante media hora.