Crónica. Despedida de Europa sin coraje y corazón

El Atleti se marcha de Europa en un partido donde, sin coraje ni garra, mostró muchas menos ganas de ganar que su rival. A partido único todo podía pasar y lo que sucedió fue la eliminación colchonera. Un año más, a combatir y levantarse.

Ni fu ni fa en la medular, y el VAR

Lo deportivo arranco con un Leipzig con la posesión del esférico. Se mostró contundente en el medio del campo el cuadro alemán, todo ante un Atleti seguro atrás. Tuvo su primera ocasión el Leipzig, que hizo despertar al conjunto de Simeone. Saúl comandaba al equipo todo ello con una banda izquierda en donde Lodi y Carrasco querían aprovechar su velocidad. Las aerolíneas Atlético de Madrid aparecían primero con Savic y después con Giménez. Ambos volaban en el área de Gulacsi, que en la segunda acción golpeaba a Saúl en el área. El ilicitano caía aunque el VAR, cuatro minutos después, cerró la acción sin nada punible. Todo ello con un Atleti que se hacía fuerte en el medio campo y eso hacía que las líneas colchoneras se acercaran al área alemana. El Atleti buscaba ganar balones largos, con Diego Costa mano a mano con Upamecano. Sin embargo, el RB Leipzig buscaba aprovechar cualquier ocasión de contra que surgiera. Esto hizo llegar al cuadro de Nagelsmann, pero sin ocasiones claras de peligro.

«Brecha, cuatro grapas y a jugar. Así es el Atleti. Y así lo muestra Stefan Savic»

Ante las buenas acciones del Leipzig, con un Atleti comandado por Saúl y Carrasco, el cuadro del Cholo necesitaba algo más. El carril izquierdo era una autovía para el Atleti con Lodi y Carrasco, pero no encontraban un aliado crucial para encontrar portería. Saúl era el único que probaba a Gulacsi, pero sin ponerle en ningún aprieto. El partido estaba intenso, con un Atleti en busca del primer gol y lo volvió a intentar por el costado de Carrasco. El belga intentó recortar hacia dentro en busca de Llorente, pero el balón se marchó por línea de fondo. Todo ello justo antes de que Savic, en un balón dividido, chocara con Halstenberg. Brecha, cuatro grapas y a jugar. Así es el Atleti. Y así lo muestra Stefan Savic. El RB Leipzig aprovechaba la debilidad del Atleti en el medio del campo, con un Herrera desaparecido algo que hacía perder presencia al cuadro del Cholo en la medular. Sin embargo, el Atleti atrás no sufría aunque los de Nagelsmann lo intentaban con ahínco. Upamecano hizo trabajar a Oblak a la salida de un córner, con un remate en el que se deshizo con un empujón de Trippier. Una intervención nada difícil para el meta esloveno. El encuentro se iba al tiempo de descanso con Savic volando en el área alemana.

Sin garra y sin suerte

El inicio del segundo tiempo continúo como la primera mitad, pero con un cambio sustancial. En la primera combinación larga del Leipzig, movió el balón de lado a lado y acabó con un balón al área que Dani Olmo envió al fondo de la red con un cabezazo perfecto. El Atleti se ponía por detrás en el marcador y tocaba nadar a contracorriente. A partido único, restaban cuarenta minutos en busca de, al menos, el gol del empate. Y por ello el Cholo se puso manos a la obra, dando paso a Joao Félix en lugar de Herrera. Reestructuraba así el equipo el Cholo, con Koke como conexión entre el medio del campo y la defensa. Tras él, una línea de cuatro y Diego Costa en punta. Tras ello el Atleti buscó carburar y apareció entre líneas, para encontrar a Lodi que cayó en el área pero vio amarilla por simular. Joao Félix salió con ganas y buscó ser el revulsivo necesario para el empate. El portugués carburaba, parecía comenzar a agitar su varita pero no servía. Y se vio en una jugada individual de Joao que acabó con un balón a Carrasco sin fortuna para el belga. Y a la tercera fue la vencida, Joao se la guisó, Joao se la comió como Juan Palomo. Y en el área fue derribado y provocó un penalti. Y no dudó desde los once metros y Joao, con confianza, convirtió la pena máxima.

«Un día donde nada salía, y en donde el Leipzig puso más garra y coraje que los del Cholo»

El Atleti igualaba la contienda cuando el Cholo decidió retirar a un Costa que, pese a pelear, no consiguió entrar en el partido. En su lugar entró al campo Morata. Cuarto de hora para el final y todas las espadas al aire. Sin embargo, la suerte siguió sin estar de parte del Atleti un año más. En un día donde nada salía, y en donde el Leipzig puso más garra y coraje que los del Cholo, un rebote les benefició en la recta final. Un disparo desde la frontal, que iba fuera, Savic vio como le golpeaba en su pie y se marchaba para dentro. Se adelantaba el Leipzig por segunda vez en el partido, esta vez sin tiempo para reaccionar. Y así fue, otro año más el Atleti decía adiós en un partido para el olvido.

El Atleti se despide así a las primeras de cambio después de caer por dos goles a uno ante el Leipzig en el José Alvalade.