
Foto: Club Atlético de Madrid
Tres empates consecutivos que se «hacen buenos» tras la victoria del Atlético de Madrid B por cuatro goles a dos frente al San Fernando CD Isleño. Un partido marcado por la aparición de los canteranos convocados por el primer equipo.
El partido comenzó a favor del filial cuando, en el minuto 11′, una jugada a balón parado de Mario Da Costa fue a parar a la mano de un contrario. El colegiado señaló el punto de penalti y Abde, engañando al meta rival, puso el 1-0 en el marcador. Hubo algún que otro acercamiento de los andaluces, pero el Atleti B asestó un nuevo golpe marcando el segundo gol. Marco realizó un magnífico cambio de dirección que recibió Pablo Pérez y cedió a Mario da Costa para que, llegando casi a línea de fondo, asistiera a Diego Bri. Parecía que se ponía todo del lado de los rojiblancos.
Sin embargo, como suele pasar en el Atlético de Madrid, tocó sufrir. David Ramos le puso un gran balón a un Dani Aquino que remató cual delantero de área. Eso sí, en fuera de juego, pero como no existe VAR, el gol se dio por válido. Un gol revisado posteriormente para confirmarlo y, en efecto, el ex de la cantera del Atleti estaba en posición antireglamentaria. Desde esa acción, en el minuto 29′, hasta el final del primer tiempo, el filial trató de ampliar la ventaja para conseguir algo de tranquilidad de cara a los últimos 45 minutos.
El filial sigue los pasos del primer equipo
La segunda parte inició con el B llevando las riendas del partido, sufriendo también cada vez que el San Fernando se acercaba al área de los de Tevenet. El visitante movió ficha, dando entrada a un mítico como Biabiany que, como no podía ser de otra manera, consiguió el empate para su equipo en el minuto 64. Una gran contra del rival, mal defendida en el sector derecho, hizo que tanto Biabiany como Luis Ruiz (asistidor) causaran estragos al espacio. Tocaba remar de nuevo, parecía que la racha sin victorias se prolongaría…o no.
Y es que, en el minuto 80′, con Salim, Gismera y Kostis entrando como suplentes (llegaron justos a la segunda parte, puesto que habían sido convocados por el primer equipo y estuvieron presentes en el Metropolitano), llegaría el 3-2 que podía parecer definitivo. Tras un mal despeje del portero visitante, Salim sacó un córner exquisito para que Marco Moreno lo rematara al palo más lejano, introduciéndose el balón en la portería tras impactar en dicho poste. No conformes con ello, y tras varios parones durante la segunda parte (el árbitro, demasiado protagonista de nuevo), se concretaron 6 minutos de alargue con una roja incluida a Santiago Nondedeu (utillero del club) por retener un balón para que el rival tardara en sacar de banda. Tocaba sufrir para obtener los 3 puntos y, en un despeje de Pablo Pérez, Nabil se fue en carrera por banda izquierda (fue el primer cambio del filial, entrando por Abde) y asistió a la perfección a Guerrero, que marcó el 4-2 por debajo de las piernas del portero visitante. Liberación. A falta de un minuto, el filial había matado y rematado el partido para volver a ganar un partido, cuando no lo hacía desde la jornada inicial frente al Antequera.
Ahora, el equipo realizará dos salidas un tanto particulares, puesto que visitará primero al colista, el Atlético Baleares, y posteriormente hará lo propio con el líder absoluto de la categoría, el CD Castellón.