Foto: Atlético de Madrid
El Atlético de Madrid es, por ahora, el único equipo de LaLiga que ha ganado sus dos partidos. Todo esto gracias a Correa, quien ya lleva tres goles esta campaña en dos partidos. El público también estuvo a la altura en su vuelta durante el Atleti 1-0 Elche.
La primera duda en el planteamiento de Diego Pablo Simeone fue despejada en apenas segundos. Kondogbia iba a actuar de tercer central, tal y como hizo Mario Hermoso ante el Celta de Vigo. El primer acercamiento del Atlético de Madrid llegó por el lateral izquierdo, pero Carrasco y Saúl no se entendieron. Más tarde, Correa y Llorente intentaron dos centros que se quedaron ahí, en el intento.
Saúl realizó el primer disparo hacia la portería de Kiko Casilla, pero el balón se marchó alto. El zurdazo del ilicitano se ejecutó a las mil maravillas. Simeone pedía a los suyos subir líneas, mientras el Elche defendía con todos los hombres en su campo, aunque con la línea defensiva bastante adelantada. La falta de espacios también dejaba sin ideas a los locales.
A destacar también cómo el Atleti presionaba muy arriba e iniciando la presión Rodrigo de Paul, dejando a Koke algo más retrasado. El argentino parecía más que adaptado al equipo y al sistema de su compatriota. Con el paso de los minutos, los colchoneros daban un paso atrás a la vez que el Elche despertaba. Dos faltas fueron las ocasiones más peligrosas de los visitantes durante la primera media hora.
Tras la pausa para la hidratación, el Atleti volvía a hacerse con el control de la pelota. Llegó un juego de paredes entre Llorente y De Paul que acabó con centro del lateral, el cual remató Saúl, pero sin mucho éxito. El esférico se fue alto. Minutos más tarde, Lemar entroncó un disparo desde fuera del área con la zurda que se marchó fuera.
En el minuto 36, Kondogbia y De Paul hicieron un trabajo perfecto en la presión para robar el balón al Elche. El mismo quedó en los pies del argentino, que encontró a Correa en un pase en profundidad por encima de la defensa. Ya en el área, el delantero engañó a Kiko Casilla, que no tocó la pelota, para dejarle atrás y definir con el exterior haciendo el primer gol del encuentro. Con el resultado a favor, se llegaba al descanso.
Unocerismo y trabajo
La segunda parte comenzó con el mismo guión. En un córner, José María Giménez remató el esférico, pero se encontró con una gran parada de Kiko Casilla. Tres minutos después, el Atleti se volvió a encontrar con Casilla, esta vez parando un balón a Carrasco, que recibió un pase de libro por parte de De Paul.
Llegaron los cambios. Simeone dio entrada a Luis Suarez y Trippier sentando a Lemar y De Paul. También Fran Escribá dio entrada a Benedetto, que tuvo su oportunidad con un lanzamiento desde fuera del área que acabó en las manos de Oblak. Un momento del partido en el que el Elche volvió a despertar.
Vino la pausa de hidratación y poco más pasó. Un tiro de Luis Suárez que se marchó alto. Continuaron los cambios, uno triple por parte del Elche que hizo cambiar el sistema. El resultado no se movió hasta el pitido final, por lo tanto, victoria y liderato en solitario a expensas de lo que hagan los rivales.
