Nueva victoria del Atleti en esta pretemporada, esta vez ante el Brighton & Hove Albion, en un partido que no va a pasar a los anales de la historia del deporte balompédico.
Muy superiores los de Simeone, tanto con balón como posicionalmente, carecieron de chispa en los metros finales para haber conseguido un resultado más holgado que hubiera ahorrado ciertos agobios al final del encuentro.
Al igual que ocurrió en la reciente Audi Cup, Carrasco fue el jugador más inspirado en ataque de los rojiblancos. Siempre punzante, rápido y con muchas confianza, dos buenas jugadas suyas estuvieron a punto de adelantar a su equipo, si no llega a ser por sendas intervenciones del portero local, Ryan, que no hicieron presagiar la tremenda pifia que realizó después y que supuso que Gaitán hiciera el primer gol del partido. Tampoco este lance hizo presagiar el desastre que le sobrevendría también al propio jugador argentino en la segunda parte. A partir de ese instante, todo lo que hizo lo hizo mal, y lo peor de todo no es que lo haga las cosa mal, sino la pachorra y la desgana que rezuma en cada acción en la que está él de por medio. Me temo que si de algo ha servido este amistoso, es para señalarle aún más, si no estaba sentenciado ya por el Cholo… El colmo fue cómo, sin venir a cuento, regaló el balón a un contrario con una desidia absoluta en el medio campo mientras, con los brazos en cruz, se quedó protestando no se sabe muy bien qué al árbitro cuando no había un jugador rival en al menos cinco metros a la redonda. Todo acabó con el 2-2 británico en una jugada en la que a Juanfran también se le vieron las costuras.
Al final, toque de corneta de amor propio del equipo y a tres minutos del final Lucas convirtió el 2-3 definitivo, en lo que es su primer gol con el Atlético de Madrid, tras una jugada dentro del área de Griezmann, cuyo remate sacó Ryan. Otro partido ganado que prolonga las buenas sensaciones tras la Audi Cup conquistada en Munich hace unos días. Ahora esperan Getafe y Leganés el fin de semana que viene para terminar las puesta a punto antes de comenzar, por fin, la Liga en Girona. Qué larga se hace la espera…
