
Después de un mes de abril en el que el Atleti había recuperado la solidez que no había tenido en toda la temporada, la antepenúltima jornada de la presente Liga ha vuelto a traer los desajustes defensivos, la falta de solidaridad, la dejadez y la falta total de intensidad tras la consecución del primer gol de los locales, en el cual Pedrosa tuvo una autopista totalmente libre de 70 metros hasta la línea de fondo de la portería de Oblak, y para terminar de entrar premiar la galopada del lateral, Savic decidió facilitar aún más las cosas antes de dejar a Godín con todo el marrón encima. Hasta entonces los rojiblancos habían manejado el ritmo del partido e incluso habían gozado de un par de ocasiones para ponerse 0-1.
Tras el descanso, el segundo regalo de la tarde, que para eso era la víspera del día de la madre. Incomprensiblemente, Rodri realizó un pase horizontal sin mirar lo que había alrededor con todo el equipo volcado en campo rival. Atrás quedaron solamente Filipe y Godín ante la acometida de tres jugadores locales lanzados a la contra. Balón filtrado a Borja Iglesias y 0-2. A continuación vino el despropósito de los cambios, que incluso empeoraron lo que parecía imposible de empeorar. Simeone decidió castigar a Rodri e ignorar a Thomas, de los cuales está demostrado que este equipo no puede prescindir. Saúl pasó del medio al centro de la defensa y vuelta al medio, Correa lo intentó. Vitolo ni eso. Para terminar, Munuera Montero decidió que no podía terminar el partido sin dejar su sello particular. Como esta vez no se podía expulsar a Diego Costa por ir a celebrar un gol junto a la grada, qué mejor que inventarse un penalti para terminar de redondear el desastre. Penalti que, por ejemplo, no fue cuando Chiellini se llevó por delante a Correa.
Lo mejor de todo es que ya quedan únicamente dos partidos y que el segundo puesto está a tiro de un punto. Después habrá que sentarse y analizar el futuro con tranquilidad porque la tarea de sustituir a ciertos pilares de la plantilla no va a ser nada fácil. En cualquier caso, estando ahí Simeone hay más garantías para ello.