
FOTO: AtléticoDeMadrid
Empezaba el partido con el Atleti aventajando en 4 puntos a su rival en la lucha por el segundo puesto y todo terminó exactamente igual que estaba, solo que con un partido menos. Empezaba también con ambos equipos mirando de reojo lo que les viene en Europa, teniendo en cuenta que en la Liga ya no hay mucho más que rascar, aunque los rojiblancos no podían mirar tan de reojo, dado lo precario de su plantilla y la dificultad que entrañaba la plaza de hoy.

No fue una buena primera parte del Atleti. Muy encerrado atrás, cuando recuperaba el balón las transiciones defensa-ataque o eran lentas o bien imprecisas y apenas llegó con peligro al área de Navas. A ello también contribuyó la buena presió alta de los locales. Eso sí, cuando Vitolo se disponía a encarar costarricense al filo del descanso después de una arrancada desde campo propio, el linier se inventó un fuera de juego que solamente vio en su imaginación. Aguantó el Atleti con la portería a cero, gracias a Oblak, una vez más y al orden defensivo
La segunda parte empezó con el Madrid marcando y a partir de ahí el Atleti decidió, por fin, soltarse. Fueron los mejores minutos de los visitantes. Empató Griezmann, tras una gran jugada entre él mismo, Thomas y Vitolo, al que aún le falta la regularidad necesaria para terminar de entrar en el equipo. No paró ahí la cosa, y decididamente los del Cholo se fueron a buscar el segundo. Tuvo 15 minutos en que pudo haberlo conseguido. Primero, en una contra vertiginosa que culminó Koke con un tirazo desde el punto de penalti que sacó Keylor milagrosamente, y después, en otra contra conducida por Saúl, que no acertó a buscar a Costa en un dos contra uno. Por último, fue Correa al que le faltó fe para culminar un control y un pase de fantasía de Griezmann. Posteriormente, Simeone decidió dosificar lo poquito que tiene y nos privó de Diego Costa. Ahí terminó el partido y rápidamente vimos que lo máximo que íbamos a rascar era el empate. El Atleti volvió a acularse en el área y no volvió a salir a la contra. Ni Correa ni Gameiro aparecieron. El que sí apareció una vez más fue Jan Oblak. Sacando una falta tirada a la escuadra como el que se estira a alcanzar un libro de la estantería. Una vez más haciendo fácil lo casi imposible. Ya no hubo tiempo para más. Reparto de puntos y un dato importante: el Atleti no pierde en el Bernabéu en Liga desde 2012. Sí, 6 años. Los mismos que lleva Simeone aquí. Por si alguno no se acuerda, de lo que pasaba antes allí cada vez que tocaba ir.