
FOTO: AtléticodeMadrid
Trámite cumplido y a octavos de final de la Europa League, a la espera de que se conozca el próximo rival en unas horas. Un partido que, debido a las holguras con las que veníamos de la ida, no tuvo nada de historia más allá de un gran gol de Gameiro, que sigue en racha, y una buena primera media hora que auguraba algún tanto más. Al final, el marcador no se movería y el juego fue decayendo con el paso de los minutos hasta dejar de existir directamente. Si hubo algo que agitó el choque fue todo el ruido mediático generado por diversas cuestiones, algunas de ellas infladas artificialmente una vez más por cierta parte de la prensa. Sí, estoy hablando de un nuevo y capcioso intento de búsqueda de confrontación entre dos símbolos del Atlético de Madrid, como son Diego Pablo Simeone y Fernando Torres. El Metropolitano habló claro y no hay más que decir sobre aquellos que únicamente dedican titulares y portadas al Atleti cuando hay que hablar mal de él.

El otro runrun que flotaba en el ambiente era el relacionado con la posible inminente salida de Carrasco a China, que a su vez puede devolver a Gaitán a un lugar más relevante en la plantilla. Desconozco los detalles de la oferta, pero creo que a día de hoy, e independientemente de lo que pueda suponer a nivel económico, en lo deportivo supone un debilitamiento de la plantilla. Luego está el deseo del jugador, al que no le amargará cobrar 10 millones, como es normal. Otra cosa es lo que puede suponer esta aventura para un jugador de 24 años, que no ha terminado de explotar y en puertas de un Mundial… Allá cada cual.
Como ven, del partido no hemos hablado casi nada. Fue como la calma que precede a la tempestad que se avecina, cuyo primer envite tendrá lugar en el Pizjuán el domingo ante un Sevilla al que se le tiene ganas después de lo que ocurrió en Copa. Sacar ese partido adelante colocaría al equipo en una clara posición de fuerza justo antes del choque clave del Camp Nou. Pero para eso faltan dos semanas. Tiempo de sobra para seguir fabricando historias de terror de aquí a entonces. Apuesten a que aparece más de una.