Tras algo más de 24 horas. Tras más de 24h sin dormir. Tras horas y horas caminando bajo el caluroso sol de Milán. Tras una experiencia inolvidable, he decidido pasar a escribir las siguientes líneas.

Nunca, y cuando digo nunca es nunca, me voy a sentir defraudado por estos jugadores, por este cuerpo técnico, por estos aficionados y mucho menos por este escudo. Es duro llegar tan lejos, luchar tanto y caer de esta forma tan cruel e injusta. Pero así es la vida, como el Atleti, injusta. Por que nunca dejamos de creer, por que las calles de Milán fueron rojiblancas por un día. Por que un restaurante italiano parecía madrileño al unísono con unos «te quiero Atleti» o canciones varias. Por que esto es el Atleti señores.
Tras el gol de Ramos, la afición no dejó de creer. Durante el calentamiento, durante el partido y durante el post se aplaudió, se animó y se sintió orgullo de un grupo de jugadores increíbles que se dejó todo. Por que no es fácil llegar a donde hemos llegado. Así fue la tanda de penaltis, injusta. También felicitar al Madrid, para los que luego dicen.
Pedir perdón a todos nuestros mayores, por que para ellos será incluso más duro que para nosotros, los jóvenes. Destacar, tras el encuentro camino de los autobuses una charla, con ese hombre mayor que intentó consolarme, que me decía que había vivido las tres finales de Copa de Europa, pero que estaba seguro que volveríamos. Increíble, pero cierto, como alguien, a sus 81 años de edad, cree que se puede. Por que sí señores, ese es el sentimiento de un Atlético, el «creer que se puede», el del «esfuerzo no se negocia» o el «nunca dejes de creer». Que ha sido muy duro y será, pero no queda otra que agachar la cabeza, BESAR EL ESCUDO DEL ATLÉTICO DE MADRID, y volver a levantarla, por que juntos somos más fuertes y eso nos hará seguir estando donde estamos.
Para terminar, hacer mención especial a Juanfran. Al rayo, decirte que estoy orgulloso de ti, que eres un señor de los pies a la cabeza. Que tus lágrimas son mis lágrimas y que volveremos. De verdad, gracias Juanfran.
A todos los que os hayáis parado a leer estas líneas, que he escrito entre lagrimas, deciros que sólo entenderá mi locura, quien comparta mi pasión. HOY Y SIEMPRE ATLÉTICO DE MADRID.