El Atlético de Madrid afronta la penúltima jornada de la fase de grupos de la Champions League con la obligación de ganar y esperar al resultado del Qarabag ante el Chelsea. La AS Roma será el rival a batir en el Metropolitano. Un hueso. Los de Diego Pablo Simeone lo tienen casi imposible y buscan ganar los seis puntos que les queda y rezar mucho a todos los santos azerís para que arrebaten algún punto a Chelsea o Roma. Los colchoneros no podrán contar con Savic por sanción ni con Sime Vrsalkjo que sigue con molestias. Nada nuevo bajo el sol.
Por su parte los de la capital italiana están en un estado de forma tremendo. Una situación en Champions privilegiada con casi certificado el pase a octavos de final y muy cerca la primera plaza del grupo. Buscarán ganar en el nuevo estadio del Atlético de Madrid y dejar todo visto para sentencia. La victoria de los de Di Francesco en el Olímpico ante los de Antonio Conte ha sido un punto de inflexión y el climax del buen estado de los romanistas. Un estado que repercute tanto en Serie A como en la Liga de Campeones. El último partido que han jugado certifica estas grandes sensaciones. La victoria en el derbi romano ensalza las virtudes de un grupo de futbolistas muy peligrosos por su ambición y por su gran compenetración. La Roma está siendo un conjunto con una gran pegada, capaz de desarticular cualquier sistema defensivo con una transiciones de balón rápidas mezclando con posesión y balones al área hacia el delantero centro. Sobretodo un bloque bien conjurado. En defensa son bastantes seguros aunque se les puede encontrar debilidad en la velocidad de los centrales, sobretodo con Fazio que tienen ciertas carencias al espacio. Los hombres de banda están mejor que nunca y eso es un problema para los de Simeone que tienen que llevar el peso del encuentro y pueden conceder espacios atrás. Un hueso en toda regla que está siendo una de las revelaciones de la Champions League en la que todavía no ha perdido.
Para este partido el técnico italiano tiene las bajas de Shick y Florenzi que se han quedado ambos fuera de la convocatoria. Ellos se unen a la baja de Karsdrop, el lateral derecho ex del conjunto de The Kuip estará fuera varios meses tras una dura lesión. En la portería estará el brasileño Allison. El arquero pasa por el mejor momento de su carrera y está siendo un muro como pudimos ver en la ida en Roma. La zaga de centrales la formarán Manolas y Fazio. Ambos solventes aunque algo lentos al espacio. En los laterales Kolarov y Bruno Peres serán los encargado de subir y bajar la banda creando estragos en la parcela ofensiva. Kolarov está en una segunda juventud, actualmente el lateral más decisivo en Europa. En un estado de forma espectacular. En el medio Strootman y De Rossi formarán la medular. Solventes los dos, experiencia para equilibrar el equipo y garantía en el pase. Son el timón. Por delante Radja Naingollan pone la garra, la agresividad, la llegada y la calidad. Todoterreno. El crack, imprevisible y eficaz. Peligro constante. En las bandas Perotti está en un momento dulce, golazos a pares y desborde constante. Ojo con sus grandes centros. «Il Faraone» estará por la izquierda, volviendo a ser el de sus inicios. Sacando su calidad a relucir para dejar sentados a sus defensores. Últra peligroso para Juanfran. Hombre clave. De delantero estará el matador bosnio, un rematador nato. Pilla todo lo que está en el área. Temporadón el de Edin Dzeko, el Chelsea ha dado cuenta de ello.
Un equipo infravalorado pero que actualmente es uno de los grandes peligros europeos. Italianos muy buenos y en buena racha. A sufrir y a por la victoria.