Exhibición. Así se puede calificar la goleada del Atlético al Rayo Vallecano en una nueva jornada de La Liga. Todo con varios nombres propios, destacando Pablo Barrios, excelso en la medular, y un Griezmann que parece recuperar su nivel.
Empezar y besar el santo. Sin tiempo para siquiera sentarte, Griezmann anotó su primer gol de la temporada tras un gran pase de De Paul. Todo en un inicio de partido que fue la constante durante el resto del mismo. Jugando con balón, con un Barrios excelso y con Griezmann recuperando su mejor nivel. Todo con un Memphis peleón, trabajador y buscando un gol que llegó al cuarto de hora. Todo tras una gran acción de Saúl por la izquierda, poniendo un pase medido al corazón del área donde Memphis no falló y anotó el segundo.
Un inicio espectacular, totalmente diferente al vivido en el Villamarín y que sólo dio pie al Rayo Vallecano a balón parado. Una situación que fue a menos, justo cuando Memphis se llevó la mano atrás y pidió el cambio por lesión. En su lugar entró Morata y justo un minuto después, Nahuel arrancó la moto por la derecha, recibió un balón a la espalda y batió a Dimitrievski en el mano a mano. Volvía a ver portería el argentino, en un primer tiempo para guardar por parte del Cholo y los suyos.
La exhibición continuó en Vallecas
El segundo tiempo arrancó tranquilo, con el Rayo Vallecano intentando recortar distancias y con el Atlético manteniendo su situación en La Liga. Parecía que se habían acabado los goles hasta que apareció la reivindicación de uno de los goleadores. Y es que Saúl, una vez más, se puso en el papel de asistidor y Morata, sólo ante Dimitrievski, no falló en el mano a mano. Un gran gol para una recta final abrumadora.
Y es que entró el encuentro en sus últimos diez minutos cuando Correa, tras un error del guardameta, lo aprovechó y anotó el quinto a puerta vacía. Un gol de pillo, ante la presión de Morata que propició la goleada de los rojiblancos. Una goleada a la que Morata volvió a sumarse. Correa filtró un buen balón al madrileño, que recibió en posición correcta, controló y cruzó un zurdazo la palo largo para hacer un maravilloso gol. Una gran actuación del español, que también participó en el último de la noche, cuando Llorente hizo el último con un gran disparo desde el balcón del área.
Una noche de ensueño en Vallecas. El Atlético anotó su mayor goleada fuera de casa y afronta así el último duelo antes del parón con muy buenas sensaciones.