Contracrónica: «Realidades»

El Atleti empató a uno ante el Levante. Lo malo es que hay mucho seguidor colchonero que se cree todo lo que le cuentan.

Levante Atleti

CONTRACRÓNICA. Todos sabíamos que en función del resultado que se diera entre el Levante y el Atleti, la central de información daría la Liga por abierta o cerrada. Por supuesto, el Real Madrid también jugaba este partido. Siempre lo hace, porque la realidad futbolística en este país siempre baila al son de lo que hagan los blancos, estén en la situación que estén. Esta vez no iba a ser diferente, y los portavoces de la verdad única han determinado que la Liga ahora sí está abierta y seguirán con sus cábalas y cálculos de lo que puede ocurrir de aquí al 7 de marzo, día del derbi.




Lo malo es que hay mucho seguidor del Atleti que se cree todo lo que le cuentan desde esa central de información.

Pues no, la Liga nunca estuvo decidida. Ni hoy ni hace un mes. Tampoco lo estará después del 7 de marzo ni después del 7 de abril. Lo malo es que hay mucho seguidor del Atleti que se cree todo lo que le cuentan desde esa central de información y después del 1-1 ante el Levante, hoy estarán montando su drama particular ante la tragedia que se avecina, sin pararse a analizar que su equipo es líder con 55 puntos, con 6 de ventaja sobre el segundo y con un partido menos. Tampoco se pararán a disfrutar de la gran temporada que estamos viviendo, otra más dentro de algo que se está convirtiendo en habitual durante los últimos 10 años y que lo era mucho menos antes de esta década.

El caso es que los colchoneros arrancaron el partido con toda la intención del mundo para ir a por él. Encerraron al Levante en su área y el gol parecía cuestión de tiempo. Lo fue, pero lamentablemente en el sentido menos esperado. Un desajuste de Giménez, muy errático todo el partido, fue aprovechado por el Bardhi a la contra para hacer el 1-0. Los del Cholo siguieron a lo suyo e intensificaron la presión, aunque el con el balón el equipo se empezó a mostrar muy impreciso y acelerado. La intensidad tuvo su fruto gracias, una vez más, al estado de gracia permanente en el que se haya Llorente, que con algo de fortuna puso el 1-1 gracias a un derechazo desde fuera del área. Siguió el Atleti buscando el gol. Suárez y Llorente, en la misma jugada pudieron lograrlo, pero sus remates se encontraron con Aitor, que desbarató ambos disparos con acierto.

Insistir del Atleti, resistir del Levante

La segunda parte arrancó, con el mismo cambio del partido anterior al descanso, pero al revés. Entraba Kongdobia y salía Vrsaljko. Para Llorente quedaba todo el carril derecho y a la larga se demostró que ni ese ni los demás cambios fueron acertados. En el minuto 47 llegaría la ocasión más clara del partido y posiblemente de toda la carrera de Correa. Una gran maniobra de Luis Suárez en la frontal para hacerse hueco, fue culminada con un disparo raso del uruguayo despejado con muchos apuros por Aitor. El rechace se le quedó franco a Correa, que con todos cantando el gol, echó el balón arriba ante la incredulidad general. Cosas del fútbol… El argentino ha sido capaz de marcar y asistir en situaciones infinitamente más complejas, pero esta vez el azar quiso negarle la gloria que hace unos días le concedió en Granada.

Con el paso de los minutos y los cambios realizados, el equipo se fue desactivando más, a la vez que el Levante adelantaba 10 metros sus líneas. Todo el peligro de los de amarillo ayer, llegaba por el costado de Llorente, culminando una y otra vez galopadas que no encontraban un remate claro. Aun así, se pudo perder el partido al filo del 90, si Oblak no saca una de esas manos imposibles abajo.




Al final, se sumó un punto en el Levante – Atleti y se sigue ampliando la ventaja con el segundo clasificado. Todos hubiéramos querido que fueran 3 puntos y no 1, pero es lo que hay. Eso y que debemos ser conscientes de que esto es muy largo. Que falta mucho y que el partido a partido es por algo. No es una frase hecha para sacarse presión de encima, sino una realidad.

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