Broche de oro a un fin de semana de ADN colchonero

La ciudad deportiva Wanda acogió al partido que enfrentaba al Atlético de Madrid B y al Salmantino. El estadio principal del Cerro del Espino lució un aspecto diferente al que estamos acostumbrados a ver. Menos cantidad de escaleras y más asientos, supresión momentánea del marcador (posible aumenta de la grada donde se ubica el mismo) Pero lo que más se ha notado ha sido la eliminación del techo de la grada principal. No se sabe si la cubierta volverá a instalarse o nunca más volverá. Lo que si que está claro, es que  se está aumentando la capacidad de albergar espectadores del estadio.

En los primeros diez minutos del encuentro,  ambos equipos mantuvieron una dura pugna por el control del juego, llevándoselo el conjunto salmantino. Hubo una ocasión por cada equipo. Seguían sumándose los minutos en el terreno de juego y seguía sin haber un claro dominador. Hasta que en el minuto 19, gol de Joaquín tras una infinidad de rebotes, entró llorando el esférico después de que Alcolea  pusiese las manos demasiado blandas.Tras este gol fue un toma y daca de ocasiones para ambos equipos, un auténtico correcalles. Cabe destacar la gran presencia de aficionados salmantinos desplazados a las instalaciones del Cerro del Espino. Durante los 90 minutos del duelo no pararon de animar y apoyar a su equipo, una afición sin lugar a dudas de primera. A la media hora de partido el guardameta visitante sufrió un amago de lesión tras intentar interceptar un pase de la muerte que había dado Poveda tras irse por corpulencia de la defensa castellano manchega.  Cada vez que el Atlético de Madrid B se acercaba al área lo hacía por mediación de Darío Poveda. Un jugador que provocó muchos estragos en la organización defensiva del cuadro visitante. Sólo le paraban a base de faltas, que en  una ocasión llegó a ser amarilla. En el 41, Joaquín filtró de forma magistral un balón entre líneas para Borja Garcés. El 11 trató de colar el balón entre las piernas de Alcolea, pero el meta del Salmantino las cerró a tiempo, evitando de esta manera el 2-0. Aún así, el cuadro rojiblanco cerró la primera mitad del encuentro mostrando una gran seguridad y madurez.

EXPULSIÓN Y GOL EN EL DESCUENTO

Comenzó la segunda parte con un  Salmantino mucho más atacante y dominador que el de la primera.  A pesar de ello el cuadro madrileño supo mantener la calma llegando a tener dos oportunidades de gol, pero los dos disparos salieron desviados muy por encima de la meta visitante. Aitor puñal tras una entrada fea de Víctor Ruíz que fue amonestada con tarjeta amarilla, protestó de una forma demasiado efusiva al colegiado provocando la roja directa y dejando así, al conjunto local con 10 a media hora para llegar al 90. Óscar Fernández tuvo que cambiar a Borja Garcés por Carro, para ocupar la posición de Puñal. Fue entonces cuando el Salamanca empezó a dominar el control del partido. En el 70, llegó de las botas de Mousa el merecido empate a uno. Para intentar de buscar el tanto de la victoria, el técnico rojiblanco dio entrada al terreno de juego a Cedric. Toni Moya fue el sustituido. El valenciano acertó con este cambio, proporcionando una gran tranquilidad y organización a los diez jugadores presentes en el verde del conjunto rojiblanco.  El dominio salmantino disminuyó. Tras un fallo garrafal de Sergio, mediocentro del Salmantino, los locales estuvieron a punto de hacer el 2-1. Cedric tras un balón procedente de un rechace realizó una volea que se marchó rozando el poste izquierdo. El equipo indio se vino arriba en los últimos minutos del encuentro. Darío Poveda provocó una falta en el descuento muy peligrosa. Cristian lanzó la falta a la perfección colocándola a media altura pegada al poste derecho  de la portería de Alcolea. De esta manera los rojiblancos consiguieron una victoria épica.

Once Atlético de Madrid : Jaume Valens, Solano, Samu, Aitor Puñal, Victor Ruiz, Cristian, Joaquín, Óscar, Toni Moya, Poveda y Garcés. Suplentes: Ricard, Mikel Carro, San  Romám, Cedric, Rubén Fernández y Mollejo.

Once Salmantino: Alcolea, Calero, Tayson, Toño, Armando, Sergio Molina, Owuso, Amaro, Fernando, José y Pablo. Suplentes: Ricardo, Chuchi, Antonis, Moussa, Héctor, Junior y Alberto.