25 abril, 2024

El pasado martes el Atlético de Madrid consiguió el pase a su tercera final de la Champions League, su segunda final en apenas tres años, pero no todo ha sido un camino de rosas, ha habido muchos escollos en las filas del equipo del Cholo Simeone. IMG_4177

En la edición número 61 de la máxima competición Europea, el Atleti empezó con un grupo bastante complicado, el grupo se componía de cuatro equipos bastante competitivos en sus respectivas ligas. El Galatasaray turco, campeón de su liga, era una de las posibles potencias a la hora de clasificarse para la fase final de la competición. Por otra parte, el Benfica venía con opciones claras de codearse con los más grandes de Europa. En último lugar nos encontramos con el Astana kazajo, estos eran, a priori, la parte más asequible del grupo y por lo que se vivió en el campo, dio mucho dolor de cabeza y alguna que otra complicación para todos los componentes del grupo.

El equipo debutó fuera de casa y alejado de la afición contra un Galatasaray hambriento de puntos, el partido concluiría con una victoria cómoda de los del Cholo, por un claro cero a dos, con un doblete del francés Griezmann. Tan pronto y sin darse nadie cuenta llegaba la segunda jornada de la máxima competición europea, esta vez en casa, contra el Benfica. La afición, como siempre respondió bien ante un rival que se las pintaba muy duro, y así fue, el encuentro parecía resuelto gracias a un gol de Correa en la primera parte, pero más tarde el rival reaccionaría y acortaba distancias gracias a un gol de Gaitan, ya en la segunda parte Gonçalo Guades hizo el definitivo 1-2 que sellaba la victoria del equipo portugués, esta derrota inesperada hacía que el conjunto colchonero no pudiera relajarse y les obligaba a ganar todos los partidos siguientes si querían ser primeros de grupo, y así evitar encontrar precozmente a un rival directo en eliminatorias bajas de la competición. Y así llegaba el conjunto del argentino Simeone a la tercera jornada del campeonato, con un mal sabor de la derrota en casa anterior y con ganas de resarcirse contra el Astana, también sería en casa el partido, no podían fallar, un fallo les dejaba casi sentenciados y como se esperaba el conjunto rojiblanco no falló, en casa y con su afición consiguió una victoria contundente por un 4-0 con goles de Saúl, el segundo obra del desaparecido Jackson Martínez, en tercer lugar gol obra de Óliver Torres y el último gol fue obra de Dedechko, en propia meta, quitándole de la bota él hubiera sido el gol número 100 de Fernando Torres.

IMG_4348Tras un breve parón, comenzó la segunda vuelta, una vuelta que se ponía muy cuesta arriba ya que nos tocaba jugar en Kazajistán y, no sé si será por el clima, por dicho parón o por quién sabe que, sufrimos mucho en el estadio del Astana y sin conseguir ningún gol los del Cholo se dejaban dos puntos muy valiosos a la hora de conseguir la primera plaza del grupo. Obligados a ganar todo lo que quedaba para evitar enfrentamientos duros nada más comenzar la fase final de la competición, tocaba el partido en el Vicente Calderón frente a un Galatasaray que necesitaba los puntos para pasar de ronda, pero los jugadores rojiblancos consiguieron una gran victoria por 2-0, esto daba un respiro al equipo para enfrentarse al Benfica portugués, tras una etapa no muy buena en liga y con el recuerdo de la derrota en casa, llegó el partido del Benfica en el estadio Da luz, donde dos años atrás dejaron un mal sabor de boca, para poder olvidar eso los rojiblancos consiguieron un resultado que les acercaría más a esos octavos de final tan ansiados, allí en Portugal ganamos por un claro 1-2 donde el equipo dio una lección de pizarra a los portugueses que se tuvieron que aguantar con la segunda posición del grupo.

Este resultado ponía al club rojiblanco por tercer año consecutivo en unos octavos de final de UEFA Champions League. El sorteo se desarrolló en un mañana de viernes en que se nos emparejó con todo un campeón holandés que había pasado por encima de casi todos los rivales de su grupo y que, su juego, es muy similar al que plantea el cuerpo técnico liderado por el argentino Diego Pablo Simeone. El primer partido transcurrió pasivo, y si nos ponemos así algo aburrido para los espectadores. El segundo se desarrolló el 15 de enero en el estadio Vicente Calderón, que se preparaba para ver una noche mágica como las de antaño. El partido que desplegaron los dos equipos fue conservador ya que el club rojiblanco se echaba hacia delante pero conservador ya que un gol les dejaba fuera de cuartos de final, tan conservador fue el juego de ambos equipos que se acabó llegando, por segunda vez consecutiva, a una tanda de penaltis, que algún seguidor colchonero no pudo vivir en plenas condiciones dada la tensión del momento.IMG_4508 Entonces, cuando parecía que aquella tanda no se iba a acabar nunca, ya que los dos equipos habían metido los siete primeros penaltis que habían tocado, llego un penalti lanzado por Narsight, todos se acuerdan de ese penalti que se dispuso a tirar el jugador holandés que pego en el larguero he hizo que el estadio entero resoplara de alivio, pero ahora quedaba lo más difícil que nuestro jugador marcara el gol que les diera el pase a cuartos de final, el segundo entrenador del club, Germán “El Mono” Burgos le dio el balón al lateral derecho del partido, Juanfran. El jugador español tenía a todo el estadio en un puño si marcaba llegaría la locura pero si fallaba todo continuaba en ese momento en que Juanfran Torres dispara con su pierna derecha el penalti al fondo de la red haciendo así una realidad para todos los asistentes al encuentro, el Atlético de Madrid encontraba por tercer año consecutivo en cuartos de final de la máxima competición europea.

Ya en la siguiente ronda, el sorteo se realizó como todo viene siendo habitual el viernes de esa semana, muchos hicieron sus apuestas, pero nadie podía vaticinar el peor de los caso, el campeón actual de la competición, el campeón de la liga española, el equipo que tiene en su a ver al mejor jugador del planeta, el F.C. Barcelona sería el rival para la presente ronda. Cuando Zambrota sacó esa bola del cajón la moral de los aficionados del club rojiblanco decayó, entonces el pensamiento de todos esos aficionados fue pasando por distintas etapas, hasta que llegó la etapa de la esperanza, la etapa de creer que esa victoria era posible. Sin darnos apenas cuenta llego el primer encuentro en el Camp Nou, el equipo se ponía por delante gracias a un gol del niño Torres, que después de ese gol vio dos tarjetas amarilla algo rigurosas para los aficionados, el conjunto de Luis Enrique conseguido dar la vuelta al marcador, gracias a dos tantos del uruguayo Luis Suárez, que a su vez no fue expulsado por dos acciones más graves que las de Fernando Torres. La moral de muchos atléticos decaía por momentos, veían a todo un Barça en semis de Champions, pero algunos locos creían en la remontada. Entre esos locos se encontraba el que más, nada más y nada menos que el Cholo Simeone. El Calderón lució de gala en una de sus mejores noches, la remontada era posible. El tiempo pasó volando para los aficionados rojiblancos y las entradas para poder disfrutar de la remontada se acabaron en pocas horas, entonces llegó el partido, los jugadores, también junto a los aficionados vivían una mezclan entre ilusión y nervios, ya la tensión se podía palpar en la Ribera del Manzanares. El club rojiblanco planteó un partido muy similar al del PSV, los del Cholo tenían que marcar rápido si querían seguir vivos entonces, así fue. Cerca del minuto 35 Saúl se sacó de la manga un centro magistral que el delantero francés, Griezmann, solo tuvo que rematar a placer un cabezazo imparable para el portero culé.

IMG_4239El partido transcurría con muchos acercamientos por parte de la contienda azulgrana pero tanto Oblak como todo el equipo rojiblanco rechazaban cada balón que el Barça conseguía llevar al área del portero esloveno. Ya cumplida la primera mitad y casi la segunda, el Atleti se sacó de la manga una contra magistral que si no es por el corte ilegal del centro campista de Albacete, Andrés Iniesta, hubiera supuesto el 2-0 directamente ya que el árbitro señaló pena máxima y como no, el francés transformó aquel penalti en un pase a semifinales de la competición europea. También certificaron ese pase a semifinales el otro equipo madrileño, el Real Madrid; el Manchester City y, en último lugar, el Bayern de Múnich.

El sorteo se vivió con emoción entre los aficionados del Atlético de Madrid, un sorteo que volvía a poner las cosas cuesta arriba para los de Simeone, en este caso tocaba el Bayern de Guardiola y el partido de vuelta en territorio bávaro. El partido llegó y todos los seguidores rojiblancos auguraban una victoria difícil frente al equipo alemán, y así se produjo. El Bayern llegó al campo de la Ribera del Manzanares con las ideas de derrotar a los rojiblancos, pero gracias a un Saúl colosal y gracias a su gol extraplanetario se consiguió una dura victoria que daba alas para afrontar el partido en el Allianz Arena.  Fue una dura primera parte de la eliminatoria, en la que el conjunto alemán tuvo contra las cuerdas, en la segunda mitad, al conjunto de Simeone.

Muchos fueron los que pronosticaron que el club de la Ribera del Manzanares caería en Alemania, pero tal fue su error que los chicos del Cholo hicieron un partido titánico en defensa y en sus contras tan venenosas que llegaron a desquiciar a muchos allí en Alemania. El partido se ponía muy cuesta arriba por el tanto del español Xabi Alonso y más aún cuando el colegiado pitaba un penalti a favor del equipo de casa. Pero, ¿para qué queremos un portero si no es para utilizarlo? Pues así fue, Oblak paró un disparo poco acertado del internacional alemán Thomas Muller, y no solo eso sino que haría proezas esa misma noche gracias a unas paradas dignas de un portero en la cumbre mundial.IMG_4573 Llegó la segunda parte donde los colchoneros decidieron echarse hacia adelante y así fue como se consiguió el gol. Otra vez a manos del ‘principito’ Griezmann, tras un gran pase de un Torres colosal, el partido caería en empate pero no por mucho tiempo ya que el internacional polaco Lewandoski pondría el 2-1 definitivo que pudo ser un empate a dos goles si Torres hubiera aprovechado la oportunidad de marcar un penalti señalado a favor de los rojiblancos. Esto hacía que el Atlético de Madrid pasara por tercera vez en su historia a una final de esta competición, el próximo partido será contra el vecino de la capital, que también consiguió el pase a la finalísima de Milán frente a un flojo Manchester City.

Este relato llega a su fin, pero esperemos que no sea el final del camino y podamos contar más líneas como estas tras haber conseguido la primera Copa de Europa el próximo 28 de mayo en el estadio de San Siro en Milán. A todos los atléticos que en algún momento de este largo camino dejaron de creer, decirles que no sólo de ilusiones se vive, que si se cree y se trabaja, se puede. NUNCA DEJEN DE CREER!

 

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