El Atlético de Madrid recibía al Celta en el último partido de la temporada en el Vicente Calderón. Sin nada en juego, el Cholo Simeone decidió alinear al mismo 11 que sacó en la vuelta de las semifinales de Champions en Munich, a excepción de la entrada de Savic en el centro de la defensa sustituyendo a Gímenez. Esto era una declaración de intenciones del entrenador rojiblanco, que nunca tira ningún partido y este no iba a ser menos.

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Foto: clubatleticodemadrid.com

El partido comenzaba con un dominio firme del Atlético. En el minuto 6, Saúl tuvo la primera ocasión del encuentro con un tiro desde la frontal del área que Sergio, el guardameta del Celta, le desvió a córner. En el rechace del saque de esquina, Godin tuvo la ocasión más clara de la primera parte: remató de cabeza y el balón se estrelló primero en el larguero y después en el palo izquierdo del portero vigués. En el minuto 15 lo intentó por primera vez el equipo gallego después de varios tiros rechazados por la defensa atlética. Más tarde el Atlético metió varios centros al área rival sin suerte en el remate. Cabe destacar una cabalga de Fernando Torres en el minuto 22 que acabó despejando la zaga rival.
El partido se igualó y se fue desarrollando de manera más táctica dónde las ocasiones claras brillaron por su escasez, a excepción de una falta colgada por Nolito que cabeceó Orellana y la sacó en la línea de gol Jan Oblak con una muy buena parada.

Muy diferente iba a ser la segunda mitad. A los 6 minutos de la reanudación del partido, un saque de esquina del Atlético iba a ser peinado en el primer palo por un defensa del Celta, cosa que aprovechó Torres para hacer el 1-0 en el marcador con un espectacular remate acrobático. 2 minutos más tarde, el propio Fernando remató al larguero con una media chilena un balón centrado al área. Antoine Griezmann cazó el rechace e hizo el segundo tanto en el partido. El partido se puso muy cómodo para el equipo dirige por el Mono Burgos, que ocupaba el lugar de Simeone en su último partido de los 3 que tenia de suspensión.

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Foto: clubatleticodemadrid.com

En el minuto 76, el mejor jugador del encuentro, Fernando Torres, después de un gran derroche físico se fue del campo con una gran ovación de la grada del Calderón. En su lugar entró Tiago,con una ovación tal vez mayor que la anterior, que volvió a los terrenos de juego 6 meses después de aquella horrible lesión que sufrió frente al Espanyol.

El encuentro prosiguió sin mucho más que destacar en lo deportivo. La afición fue el jugador número 12 una vez más e incluso se escucharon cánticos de ‘olé’ a unos minutos del final.

Así se da por finalizada la 3ª liga quedando entre los 3 primeros. Está claro que el Cholo Simeone está malacostumbrando a sus seguidores, pero también es seguro que los aficionados del Atleti saben lo difícil que es lo que está logrando este equipo y se lo reconocen en todo momento.

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